En casa nos gusta comer la SOPA con tropezones. Y ya si es el caldito del puchero que mi suegra nos trae, mejor!
Un caldito con toda su esencia, con horas de chup chup y hecha en un perolo de 15 litros con un montón de dedicación y cariño (cosa que yo no conseguiré en la vida 😁) y echándole un montón de avíos, como ella dice...así que siempre esperamos que la abuela nos traiga algún que otro garrafón de sopa (y de paso puchero para dos veces 😊)
De todas maneras, en casa se contentan con el CALDO DE POLLO, no es lo mismo cuando se ha probado el del puchero de la abuela, pero es lo que hay😆 y es como lo hacemos en ocasiones
Todavía no estoy preparada para todo ese cariño que se le ha de poner al asunto 😁
No suelo tener pan duro o más bien tengo muy poco y el que tengo lo uso para hacer PAN RALLADO.
Después de las calores, cuando empezamos a hacer calditos y sopitas, yo ya empiezo a reservar algunos trozos de pan para futuros picatostes y siempre tengo una buena bolsa reservada para usarlo en cualquier momento
Así que lo que hago es que cuando el pan está blando pero incomible, lo corto en rodajas de un dedo de grosor
Cada rodaja, la corto por la mitad y cada mitad volver a cortarla por la mitad
A veces lo hago a cuchillo, otras lo hago con las tijeras, porque me es más fácil.
De esta manera se cortan cuadraditos más o menos regulares
Una vez cortados los guardo en una bolsa de pan, de las de toda la vida, y ahí en un par de días, ya se han endurecido, imprescindible para poder freírlos y que se queden torraditos
Y cuando tenemos el caldito de la abuela, o en su defecto la caldo de toda la vida (también aceptamos el brick de cartón 😉)pues tan simple como freír los picatostes en una buena base de aceite bien caliente
Hacerlo por tandas, con cuidado de que no se torren demasiado e ir dejándolos en un plato sobre papel de cocina para que absorba el exceso de aceite.
Se hace en muy pocos minutos
Después tan solo hay que ponerlo en el centro de la mesa y cada uno se va echando...
A cada plato le añadimos un puñadito de jamón serrano que puede ser un recortadito de
ese final de jamón que ya está más seco...
Y le añadimos un huevo duro picadito también. Tantos huevos como comensales haya
En este caso, a falta de paletilla de jamón, usé lonchas que estaban menos secas y más blandas, pero picándolas a cuadritos, se disimula bastante
Y después cada uno se va echando los picatostes a su gusto. Nosotros preferimos echarlos y comerlos de inmediato, mientras todavía están crujientes. Por lo que continuamente vamos echando mano del plato de pan tostadito